El silencio de la afición

Marisol Lara

Twitter: @marisolinski

Honor a quien honor merece, el argentino Lionel Messi alcanzó a Raúl como el máximo goleador de la Champions League al conseguir el pasado martes un par de goles ante el Ajax, con los cuales llegó a 71 goles en tan solo 90 partidos, suena fácil, Messi hace que se vea fácil, pero no lo es, Raúl necesito de 142 partidos para conseguirlo y muy pocos jugadores han logrado más de 50 dianas en dicha competencia.

Messi es un jugador rápido, con gran visión de campo y sobretodo letal que ha conseguido anotaciones de todas las maneras posibles, algunos de ellas golazos que pasaran a la historia por la complejidad y belleza que implican.

Forma parte de una generación dorada en el Barcelona, sus logros colectivos e individuales le han valido para ser el único jugador en ganar cuatro años consecutivos el balón de oro, es el único jugador en la historia que en una misma temporada fue capaz de conseguir el Balón de Oro, el FIFA World Player, el trofeo Pichichi y la Bota de Oro en la temporada 2009- 2010 y por ende ser el mejor jugador del mundo, puede gustarnos su estilo de juego o no, pero los números no mienten, nadie puede objetar su calidad, su nivel y su constancia, me atrevo a decir que en eso radica su grandeza, hay jugadores que son mediáticos y que mantienen un nivel extraordinario una temporada y después se desinflan, pero Messi incluso en su peor momento futbolístico ha mantenido un buen nivel.

El Barcelona es un equipo muy completo, que de la mano de Josep Guardiola lo ganó todo, con pasadores como Xavi Hernández y Andrés Iniesta el trabajo en la cancha de Messi siempre fue más sencillo, Lionel nunca tuvo que cargar con el peso del equipo aunque es el máximo representante del mismo, pero no se trata de quitarle merito, al contario; si hay algo que destacar de Messi es justo su sacrificio en la cancha, no es el típico delantero caza goles que depende de sus pasadores sino que es capaz de generase el mismo la oportunidad e incluso generar oportunidades para su equipo, es el único jugador que ha sido máximo goleador y máximo asistente en la misma temporada, al conseguir en la temporada 2011-2012 un récord de 50 goles y 15 asistencias.

La única deuda que Messi tiene con el fútbol es con su selección, en donde en diferentes ocasiones se le ha cuestionado por no ser capaz de echarse el equipo al hombro y de no mostrar el  mismo nivel que muestra en su club, no todos pueden con la presión, aunque poco a poco Messi se ha reivindicado en ese rubro, en el pasado mundial él y su selección no fueron capaces de quedarse con el título al toparse de frente a un gran equipo alemán que es mejor en todos los sentidos, en dicho certamen Messi fue nombrado el mejor jugador, nombramiento que desde mi punto de vista no se merecía ya que hubo jugadores que demostraron más garra, mejor fútbol y las propias estadísticas los respaldan, la FIFA le otorgó un premio de consolación que francamente no le hacía falta.

Las últimas semanas se han cuestionado muchas cosas en el Barcelona, cada día se hace un poco más evidente que el actual técnico es Luis Enrique y que la era Guardiola ha terminado y que el equipo va a la baja, pese a esta circunstancia Messi está a dos goles de empatar a Telmo Zarra como máximo goleador de la liga española, no me queda más que decir ¡Messi sos grande!