¿ACASO SOY MI GENERACIÓN?
Por:
Sol Campero.
Preguntarme a qué generación
pertenezco es, en un nivel más profundo, preguntarme quién soy yo.
Julián Marías
Sin
duda alguna las generaciones han cambiado, evolucionado y procesado los
diversos factores sociales que transgredieron su época, cada una con distintos
modos de pensamiento reflejados en la manera de actuar y enfrentarse a estas
realidades.
¿Pero
qué pasa con nuestra generación?
Para empezar hay que entender que las
generaciones ayudan a dar un orden lógico segmentando a la historia, de forma
que cada una de estas partes comparte
rasgos similares.
Pero
al indagar acerca de nuestra generación conocida como “Millennial o Y” (nacidos
entre 1982-2000), las cosas no pintan exactamente prometedoras. Inmersos en el
mundo globalizado y postmoderno, básicamente nos han etiquetado como productos
de reluciente plástico, incapaces de vivir una vida que valga la pena.
Las
características que destacan son en su mayoría negativas: individualistas extremos, cayendo en egoístas, consumistas
desenfrenados, adictos a la tecnología, lo que lleva por lo tanto a querer
obtener una vida cómoda y digerible, somos en pocas palabras nihilistas empedernidos, empapados de
hedonismo.
Coincido
en que no se puede negar dicho postulado, por la simple y sencilla razón de ser
susceptible a comprobarse, para ello no se necesita ser un hábil investigador,
ni si quiera un observador nato, y esta conclusión es al menos para mí es deprimente.
La
cuestión aquí es sí realmente nos gusta ser vistos como ninis atenidos a
obtener todo de manera fácil, incapaces de darle la vuelta a la contexto
social.
Sé que muchas situaciones se ponen en contra,
pero esto sólo es una razón más para demostrar estoicismo, valentía y seguridad
de lo que somos, reflejar que nuestro pensamiento va más allá y que aún tenemos
sueños como muchos otros, de vivir en un mundo sin injusticias sociales.
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